11/12/09

Niñotes chiquitos

Cuando uno está en el colegio se cree el Rey del mundo, a medida que pasa el tiempo ese sentimiento aumenta. Crees que cuando acabe el colegio te sentirás realizado y que ya "diste el palo" de tu vida y ya no tendrás que hacer más nada.

El último año... eres el dueño del colegio, no hay nadie que te detenga, es de aquí pa' fuera, libreee (eso cretú como lo gallo). Esa sensación de "grande" te pone rebelde.

Esa Rebeldía lleva al grano de este post. Creyendote el dueño del mundo le hablas mal a todo el mundo y cuando los profesores te dan un boche, les respondes de freco. Craso error, cuelgas en las manos de esos viejos casi petrificados que ganan cheles normalmente por aguantarte mierda, a esos que llamas profesores.

Lo arriesgado aquí es que esa actitud no se borra al graduarse, se agranda. Te pones como gallito en la universidad porque "ahora sí eres grande". Lo chulo es cuando te pones de gallito y coincidencialmente es con un profesor que aparte de profesor es el director de tu carrera. MAKEISHON hahaha

Y ahí si, te tienes que comer tu mierda. Morderte la lengua.

Pero puede ser peor aún, imagínate que sea con tu jefe, ay papa! cero trabajo para toda la vida.

Sean humildes, dígan buenos días, incluso a los de limpieza que son personas igual que el dueño de la empresa. De paso en la calle (a menos que me venga a buscar a mi :P).

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